martes, 23 de noviembre de 2010

p 27 y 28 libro literatura respuestas

1) Analisi formal:
El texto esta dividido 23 versos, tiene aproximadamente de 7 a 13 silabas y tiene un solo periodo
2)El poema leido en clase se llama Invitacion a las Naciones trata sobre la union de los paises del occidente y el homenaje que la gente que es rendido de parte del pueblo.
3)El poema si posee una estrofa ya que esta citando a los habitantes del occidente los cuales son los hijos de espana.
4)La construccion latina de este poema deberia comenzar por abajo y terminar por arriba ya que asi el poema tuviera mas sentido.
5)El cuento final va dirigido a todas las Naciones con un solo proposito (hacerde respetar y cuidarse)
6)Hay para espana un concepto elevado porque segun el texto espana es el rey de los paises del occidente.

lunes, 22 de noviembre de 2010

periodico

Titulares de la primera plana. Fuera de servicio unidades de central electrica Tacoa
Se desplomo sector el barranco de kilometro cero
Reportan danos en cultivos en por lo menos 6 estados
Desaparecidos y miles de afectados dejan lluvia en occidente
Oposicion convoca marcha para el 27 de noviembre
Los hechos violentos son la primera causa de muerte en el pais
En lo que va del ano han asesinado a 46 motorizados al robarse la unidad
“Granma" califica de inevitables las performas del modelo cubano
“Por mi preparacion militar pude aguantar todo lo que paso”usuarios del metro relatan sus experiencias durante la prision
Loyo admite dificultad para atender reibindiacacion
PCV pide explicaciones sobre pago fraccionario de aguinaldo
Internacional= Nicaragua y Costa Rica sacuden a la OEA
Caracas=Minsalud dejo de enviar vacunas a Municipio Sucre
Caracas=Cambios empiezan a verse en hospital los Magallanes
Entretenimiento=Alejandro Sanz llego a Venezuela
Ricky martin quiere casarse

martes, 9 de noviembre de 2010

Esquema B y V

la grafia v - Microsoft Power Point

Estilistica


Estilistica
Analiza todos los elementos de una obra o del lenguaje hablado, el efecto que el escritor o hablante desea comunicar al lector o receptor del discurso hablado y los términos, giros o estructuras complejas que hacen más o menos eficaces esos efectos. Intenta establecer principios capaces de explicar los motivos que llevan a un individuo o a un grupo social a seleccionar expresiones particulares en su uso del lenguaje, la socialización de esos usos y la producción y recepción de significados. Comprende la crítica literaria y el análisis del discurso crítico. Un género literario puede observarse como un grupo de características que marcan el estilo y lo diferencian. Por ejemplo, prosa y poesía. Otros aspectos considerados por la estilística son el diálogo, la descripción de escenas, el uso de voz pasiva o voz activa, la distribución y extensión de las oraciones, la utilización de registros dialectales, las figuras de dicción y las figuras de pensamiento, el predominio de una categoría morfológica o clase de palabra, el uso de los símiles o comparaciones, la selección o predominio de unos determinados tropos, metáforas o imágenes. El lenguaje es, en términos cabales, el material del artista literario. Y se puede decir que todo autor escoge, de esos materiales, de la lengua, aquellos componentes, aquellos rasgos, que le han de servir a su propósito, como el escultor elige el mármol en que va a esculpir su estatua. La imprenta o el sello del autor, constituye el estilo. La palabra estilo proviene del latín. La voz de la que es derivada, en tal lengua clásica, equivale a cincel. (Stilus, punzón para escribir) El estilo, como concepto, se refiere a un conjunto de rasgos específicos de toda composición artística, determinado por la unión de diferentes formas que en conjunto proporcionan la obra de arte. En las obras literarias -que es lo que ahora interesa- el estilo se relaciona con el léxico y su riqueza y precisión, con la adecuación o inadecuación del mismo; también hace referencia a la estructura de las oraciones, a los giros idiomáticos, al ritmo del lenguaje... El concepto de estilo fue usado, primariamente, para el arte literario y a partir del siglo XVIII se desplazó hacia las artes plásticas. En las épocas primeras el estilo era considerado como algo objetivo, caracterizado o moldeado por el género literario elegido. Dentro de estos límites se posibilitaba cierto margen de variaciones individuales. Las "maneras de decir" o clases de estilo provenientes de la retórica antigua o medieval, constituían fundamentalmente tres: el estilo "sublime", el "mediano" y el "bajo". Cada uno de ellos tenía asignados contenidos o temas específicos. En la actualidad, el contexto objetivo o preceptivo gravita menos. El análisis estilístico se orienta de modo preferente hacia el conocimiento de los caracteres personales del autor. Todavía en Friedrich Schiller el estilo era depositario del objeto representado y todo modo de exposición "personal" de un artista era estimada como una peculiaridad "manierista". Suele hablarse de "ruptura del estilo" cuando de un nivel o estructura el autor se desliza hacia otra, súbitamente. En ocasiones ello puede responder a falta de habilidad estilística del autor, pero en otros casos es un procedimiento perseguido deliberadamente en la persecución de determinados efectos de la obra literaria. Por "medio estilístico" se entiende a cada uno de los elementos que conforman una totalidad de estilo. Así se denominan las figuras retóricas y cualquier peculiaridad del habla escrita perseguida y no obtenida por azar. Dentro de las diferentes modalidades de estilo, puede destacarse un estilo "nominal", en el cual preponderan los sustantivos; y uno "verbal", con predominio de las acciones o verbos. También se reconocen estilos "encabalgados" y no "encabalgados". En estos casos el uso del "encabalgamiento", define las peculiaridades. El estilo lacónico, conciso, ha sido tradicionalmente conocido, como telegráfico. Se suprime la mayor cantidad de nexos, y se dio en el expresionismo. El estilo "hierático" es el excesivamente rígido muy vinculado a estructuras arcaicas. Es el estilo poco espontáneo y vivo. En cuanto a la relación con el tiempo, se habla de estilo individual cuando lo que predominan son las características de un determinado autor; en el estilo de época lo que pesa es supraindividual, propio de un tiempo en la historia del arte y del arte literario en particular.


edad media


Edad media
Literatura de la Edad Media Española
La literatura española comienza con las primeras poesías en lengua romance castellano. Recordemos que en el Imperio Romano la Unidad Lingüística la constituía el Latín y la Unidad Política estaba centrada en Roma. Después de la caída del Imperio Romano, las regiones fueron modificando su lengua, evolucionando y modificándose con influencias de los pueblos primitivos, las lenguas de los invasores y las características propias de cada zona. Así nacieron las lenguas derivadas del latín vulgar que se hablaba en las provincias, llamadas Lenguas Romances, entre las cuales están el castellano, el francés, el provenzal, el portugués, el sardo, el italiano, el catalán, el rumano. Durante varios siglos de la era cristiana los textos seguían escribiéndose en latín. La obra más antigua en romance castellano que se conserva es el Poema o Cantar de Mio Cid, del Siglo XII (Hacia 1140).  Se sabe que hubo en la Península Ibérica manifestaciones anteriores de poesías primitivas, de las que ha quedado poca documentación escrita. Generalmente eran algunas poesías amorosas cantadas por trovadores, en lengua galaico-portuguesa o en romance castellano, también villancicos y las cancioncillas  mozárabes o muwassahas en hebreo y jarchas, de las que quedan algunos testimonios en trozos poéticos de Yehudá Haleví y de Todros Abulafia. El latín fue el lenguaje universal de la civilización medieval. Usado en la iglesia y en la escuela, permitía a los hombres letrados comunicarse en cualquier parte de Europa. El resurgimiento intelectual de la Alta Edad Media incluyó una explosión de literatura latina. Aunque el latín seguía utilizándose para propósitos literarios, en el siglo XII gran parte de la literatura creativa se estaba escribiendo en los idiomas vernáculos (los idiomas locales, como el español, francés, inglés o alemán).  En el transcurso de la Edad Media existió una literatura popular vernácula, la cual se manifestó, sobre todo, en las sagas germanas, celtas, islandesas antiguas y eslavas. Pero, en el siglo XII surgió un nuevo mercado para la literatura vernácula cuando los laicos educados, en las cortes y en la nueva sociedad urbana, buscaron avenidas novedosas de entretenimiento.  Tal vez la literatura vernácula más popular del siglo XII fue la poesía trovadoresca, principalmente producto de nobles y caballeros.
La Literatura en la Edad Media y el Siglo XV

Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/img_h_america.jpgLiteratura medieval: siglos V a XIV
Se llama Edad Media a la época histórica comprendida entre los siglos V y XV. Con relación a la literatura española, la época medieval se extiende desde las primeras manifestaciones literarias - de fecha imprecisa - hasta el comienzo del reinado de los Reyes Católicos.

Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/ic_bl_tit.gifLiteratura Medieval: orígenes
Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/ic_bl_tit.gifEl Poema de Mio Cid
Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/ic_bl_tit.gifAlfonso X el Sabio
Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/ic_bl_tit.gifEl Mester de Clerecía - Gonzalo de Berceo
Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/ic_bl_tit.gifDon Juan Manuel - El Conde Lucanor
Descripción: http://www.rinconcastellano.com/images/ic_bl_tit.gifJuan Ruiz - El Arcipreste de Hita



Daniel Pennac

Derechos del lector
Todos tenemos el derecho a leer, a no leer o a leer sólo lo que nos dé la gana, como nos dé la gana y cuando nos dé la gana. Faltaría más.

El decálogo de Pennac

Una lista provisional de los derechos del lector la formulaba el escritor francés Daniel Pennac en Como una novela (1992). En esa obra recriminaba a los adultos imponer la obligación de leer con argumentos tan fáciles de suscribir como los siguientes:
En materia de lectura, nosotros «lectores» nos per­mitimos todos los derechos, comenzando por aquellos que negamos a los jóvenes a los que pretendemos iniciar en la lectura:
1) El derecho a no leer. 
2) El derecho a saltarnos páginas.
3) El derecho a no terminar un libro.
4) El derecho a releer.
5) El derecho a leer cualquier cosa.
6) El derecho al bovarismo.1
7) El derecho a leer en cualquier sitio.
8) El derecho a hojear.
9) El derecho a leer en voz alta.
10) El derecho a callarnos.
Daniel Pennac
1 Enfermedad de transmisión textual. (Término alusivo a Madame Bovary, la protagonista de la novela homónima de Flaubert, lectora compulsiva y apasionada de novelas románticas.)
Evidentemente, los derechos del lector pueden ser más, pero Pennac se limita al número 10 por hacer una comparación irónica, en negativo, con los Diez Mandamientos. En la lista, como vemos, el principio y la ley que predomina es la libertad. Porque la libertad ha de estar por encima de todo: hemos de poder leer lo que queramos, donde queramos, como queramos, cuando queramos y cuanto queramos. No está hecho el mundo para perder el tiempo.
Por lo tanto, para animar a leer lo primero que hay que dejar claro es que tenemos el derecho de leer a nuestro entero gusto. Además, también queda claro que para leer bien a los clásicos y disfrutarlos plenamente, antes hay que leer muchas otras cosas más sencillas que nos vayan abriendo el apetito y la mente. Así, más tarde, ya formados como lectores con criterio, nos darán rabia las lecturas apresuradas y superficiales, nos sublevaremos ante los textos mal escritos y no permitiremos que nos engañen con mala literatura, con historias planas y huecas que no nos aportan nada significativo, ni siquiera auténtica y gozosa satisfacción.
De todos modos, me parece que la lista está incompleta. ¿Qué otros derechos como lectores nos asisten? ¿Quién se atreve a continuar enumerando? Se admiten sugerencias.
El libro de Pennac es, por supuesto, muy recomendable y apto para todos los públicos. Sin serlo, como indica el título, se lee "como una novela" y tiene esa rara facultad de los "libros vivos", esos que hablan directamente al lector. Por eso, creo que muchas personas pueden disfrutar con su lectura, así que no lo dudéis... Ánimo.
Daniel Pennac (1992). Como una novela. Barcelona: Anagrama, 1993. Traducción de Joaquín Jordà.

martes, 19 de octubre de 2010

derechos del autor de pennac

Leer por afición, leer por satisfacción, leer por placer. Son muchos y muy variados los motivos que llevan a una persona a leer, pero también son demasiados los argumentos que dan otros para no abrir nunca un libro. La principal escusa, la falta de tiempo. En este punto, nos planteamos que si existe el derecho a leer ¿por qué no va a existir el derecho a no leer?
“Como una novela” es el título de una obra de Daniel Pennac que reflexiona sobre los derechos de los lectores desde un punto de vista objetivo y realista. Basta con leer la primera frase, “El verbo leer no soporta el imperativo”, para darse cuenta de ello. Así, este profesor y escritor francés presenta un decálogo de derechos muy interesantes, que quita hierro a las férreas creencias sobre la necesidad de leer un libro de principio a fin.
El lector, simplemente por el hecho de serlo, tiene en su haber la capacidad de decidir cuándo, cómo, dónde, qué y por qué leer. Nadie puede arrebatarle esta potestad literaria, nadie debe poner en entredicho el camino que ha escogido para leer porque lo importante es iniciarse en un arte que hace más libres a las personas. Y el deseo de Pennac es reconciliar a los jóvenes con la lectura.

Libro con caféEl derecho a no leer encabeza esta curiosa lista de derechos, seguida del derecho a terminar un libro, del derecho a releer, del derecho a leer cualquier cosa, del derecho al bovarismo, del derecho a leer en cualquier parte, del derecho a picotear y del derecho a callarnos. A través de esta enumeración, Pennac aborda muchos de las preocupaciones que en algún momento han asaltado a los lectores cuando se sumergen en la lectura.
“Como cualquier enumeración de derechos que se respete, la de los derechos a la lectura debería empezar por el derecho a no hacer uso de ellos —y en este caso con el derecho a no leer—, sin lo cual no se trataría de una lista de derechos sino de una trampa viciosa”. Daniel Pennac.
Este teórico propone estas pautas como un intento de motivar a los alumnos a leer, sin obligaciones y sin prejucios, para que descubran por sí mismos todo lo que les puede aportar la lectura, ya sea de un libro, de un periódico, de una revista o de un cartel. La comparación con episodios cotidianos de la vida lleva a hacer de “Como una novela” un libro de referencia para entender que cada libro es un mundo lleno de sorpresas en el que el lector atribuye sus propios significados.
Si quieres ahondar más en la trayectoria profesional de Pennac, te proponemos que eches un vistazo a una entrevista publicada en la revista Label France.